viernes, 5 de julio de 2013

time

Tic, toc, tic, toc. No lo soporto. El día gris. El sonido de las gotas de lluvia estrellándose contra el pavimento formando una, al parecer, interminable melodía. Los pies. Un camino. ¿Qué es un camino?. Las manos en los bolsillos. El pelo chorreando agua. Pestañas cual hojas después de la visita del rocío. Lágrimas, pasaban también a formar parte de la melodía, casi indistinguibles su sonido uniendose ahora a lo que llaman música, y prácticamente invisibles en su rostro mismo. De no haber mirado la hora antes de salir, no podría haber sabido que todavía era de tarde. Toda su existencia escuchó decir que no tenía que rendirse, que la vida era un camino que debía transitar a pesar de todas las piedras con las que pudiera toparse. Te vas a caer mil veces, piba, te vas a caer mil veces, pero la clave está en levantarse y seguir como si nada pasara, no pierdas tiempo, seguí caminando, el tiempo es valioso, piba, no lo desperdicies. ¿Qué es el tiempo? ¿Es una medida? ¿Es una circunstancia? ¿Agujas moviéndose a un determinado ritmo, marcando segundos, minutos, horas, formando finalmente un reloj? Lo primero que se le venía a la cabeza al escuchar a la gente decirle eso era la frase "el tiempo es dinero". Suponía que eso se debía a que lo había escuchado infinitas veces. Miles de voces, y todas diferentes resonaban en su cabeza, pero todas le decían lo mismo. No lo entendía. A todos les enseñaban lo mismo, todos tenían que pensar igual... y después le hablaban de identidad. Tomar decisiones es dificil, piba, tenés que pensar que vas a vivir con las consecuencias después. Pero vos Pensá. Pensá. Pero acordate que tenés poco tiempo. Unos meses nada más. Acordate también, piba, que esto va a definir tu futuro. No tenés que cagarte de hambre. Cuidadito. Pero acordate que el tiempo corre y la vida es una piba. La vida es una... si. Ella era muy pasional. MUY. Era de esas personas que por defender lo que aman son capaces de cualquier cosa, y que si de una de sus pasiones se trata, es imposible ganarle una discusión, porque va a poder argumentar lo que sea que diga, desde su alma misma. ¿Y qué más sabio que el alma? ¿Qué verdad más absoluta que la que de ahí viene? Si el alma conoció la verdad en su estado más puro. Miraba sus pies, pensaba en toda su vida, desde que nació, hasta ese momento. Trataba de recolectar recuerdos. Trataba de encontrar una pista, por más mínima que sea, para entender el porqué de la situación en la que se encontraba. Todos estaban ya definidos, por lo que veía. Ella no. Ella seguía dando vueltas, y hasta se podría decir que estaba mareada. Siguió caminando, aumentando la velocidad de sus pasos, a medida que aumentaba la rapidez de la caida de las gotas, y mirándolas mientras se hallaba ya casi trotando, se puso a pensar en todo lo que era una gota, hasta llegar a meterse en pensamientos científicos, y H20, y puentes de hidrógeno, y moléculas, y atómos... y asi se perdió en un pensamiento, y de repente, al volver a la realidad se detuvo y se encontró con que había transcurrido asi ya una hora. Recordó entonces que no tenía que desperdiciar el tiempo, que había que transitar el camino de la vida a pesar de todas las piedras, y al notar que su pensamiento había sido una piedra por haberle consumido valiosos cientos de segundos, decidió recuperarlos volviendo a caminar, y ahora a trotar, y ¿qué pasó? Se vio a si misma, ahora corriendo. ¿Qué es lo que quería? ¿Qué iba a hacer con tanta pasión contenida? ¿Qué? No sé que hacer. No sé qué pensar. No sé como actuar. Cada paso que doy me asusta un poco más, y más me asusta mirar para atrás, porque si miro para atrás no miro para adelante, y si no miro para adelante no sé que tengo en frente. ¿Y si enfrente mío hay una piedra del tamaño de un iceberg? ¿Cómo me levanto y sigo después de eso? Tengo que tomar una decisión. No me queda tiempo, pero ¿Qué es el tiempo? y ¿Quién me exige que tome una decisión ya? ¿El tiempo? ¡Si ni siquiera se que es! Me gustaría volver a ser chiquita, no, dos años más no, más, no, 5 no, más, no, 10 no, más, no, 18 no... menos, no me acuerdo cuando era un embrión, no. No, embrión no. Feto, si, un feto. Me equivoqué. Pero, ¡AY! ¿Qué estoy diciendo? De nuevo estoy llegando a cualquier lado con lo que pienso. Ya es tarde, debería volver a casa, pero ya no se donde estoy. ¿Y si hago el mismo camino pero hacia atras? No. Eso sería mirar atrás y me costó mucho llegar hasta acá. Me voy a enfermar por estar tanto tiempo abajo de la lluvia. ¿Qué hago? ¿Cómo sigue esto? ¿Cómo sigo?. Piba, no jodas piba, la vida es una sola, estudia, trabaja, llenate de guita, casate, tené hijos, se su ejemplo, piba. No podía dejar de pensar en todas las cosas que le habían dicho. Pero dejo de correr, para comenzar a trotar, y dejó de trotar para volver a caminar, y finalmente caminar hasta casi detenerse. Se miró los pies. ¡Que sucios están estos zapatos! Esto me pasa por meterme en el barro. Pero en eso no pensé mientras corrí. No. ¡Que tonta sos, que tonta sos, nena! Mamá me mata. Pero no le importó tanto después de un rato encontrarse con sus zapatos nuevos totalmente embarrados... al contrario, le abrieron una puerta. Todos me dicen que elija, que decida, que tengo poco tiempo, pero me exigen que piense mil cosas a la vez, y que haga lo correcto bajo presión. No quiero correr más, ni trotar, inclusive ahora no quiero caminar. ¿Qué es un camino? ¿Está marcado ya? El camino lo hago yo, a cada paso. Entonces me va a esperar... Se detuvo finalmente, se detuvo por primera vez en serio. Se detuvo más allá de su físico, más allá de esta tierra, más allá de su alma y de sus pensamientos. Se detuvo, y con ella el tiempo. Y se hallaba ahora en otro lugar. Un lugar que no podía describir, pero que amaba. Se sentía contenida. Había una cama, un sillón y una mesa junto a un hogar a leña. La casa estaba a una temperatura agradable, al menos mejor que afuera bajo la lluvia. Estaba agotada. Se acostó, y cuando terminé de apoyar la cabeza en la almohada aún no tenía ninguna intención de dormir, pero unos segundos después el cansancio me ganó. No tenía idea de donde estaba, pero era mejor que estar en ningunlado. Al despertar la mañana siguiente, se encontró en su casa. ¿Cómo había llegado hasta ahi? No le importaba mucho, porque ahora sentía paz, finalmente. Había tomado una decisión. Había entendido una cosa o dos. No le solucionarían la vida, pero le iban a dar un empujoncito para seguir adelante por ahora, y eso era todo lo que necesitaba, porque ella era fuerte, si, lo soy, soy alguien fuerte. Finalmente entendí. Desbordo de pasión, cuando canto, cuando escribo, cuando bailo, cuando actúo, cuando leo, cuando entiendo, cuando expreso, cuando descubro, cuando pienso, cuando siento, cuando sueño. ¿Cómo puede contener tanta pasión algo tan pequeño como un ser humano? No camines, no trotes, no corras, se decía para ella misma. Ya sabía lo que era el tiempo, y no era como se lo habían pintado toda la vida. El tiempo no la corría. Transcurría como ella quería. Incluso el tiempo era diferente para cada individuo. ¿Qué decís piba? No podés tener todo piba, no tenés tiempo para todo. Los años pasan volando y la vida es una sola, piba. Le decían. Pero ya no le importaba, porque para ella el tiempo no pasaba, la vida no pasaba, la vida se hacía, se construía, se transitaba, si, como un camino, si, pero no con alguien corriendote, no. Con sus PROPIAS reglas, marcándolo, haciéndolo, con pasos, de a poco, disfrutando, apasionándose, siendo feliz, siendo ella misma, siendo. A veces nos sentimos presionados, heridos, atacados, humillados, PERSEGUIDOS. Fantasmas con nombres como tiempo, decisiones dificiles, decisiones correctas, decisiones incorrectas, pasado, presente, FUTURO. Me cansé de escuchar voces opinando sobre lo mejor, sobre lo peor, sobre los contras, sobre los pro. Sin embargo, nunca ninguna voz me convenció tanto como la mía. Un camino... pasos, trote, velocidad, correr... ¿Qué sentido tiene si te enseñan que no hay tiempo para detenerse a contemplar? ¿Qué sentido tiene seguir adelante si no podés frenar a analizar algo por un segundo? ¿Cómo sabés cuál es el siguiente paso si ni siquiera podés pensar en el que estás dando en ese mismo instante? Nos enseñan que la vida es corta, nos quieren meter ideas en la cabeza como que tenemos que tener definido nuestro futuro con tan sólo 17 años, que tenemos que tener elegida una carrera, para toda la vida, UNA CARRERA. Que el tiempo no es suficiente para hacer todo lo que querés, y que tenés que enfocarte en lo que debés, o en lo que es mejor. ¿Mejor? ¿Qué es lo mejor? Piba, tenés que estudiar algo con lo que te llenés de guita, pero UNA COSA. No dos. No, esas estupideces no. No, dejalas como hobbie, piba. Esa cabecita es un desperdicio sino, piba. No voy a elegir entre mis pasiones. Todas me apasionan. Todas son pasiones. A todas las amo. De formas distintas, pero las amo. Que lindo se siente... desbordar de pasión. Las decisiones hay que tomarlas, si. Pero nadie me corre, no no, nadie me corre. En mi camino estoy yo, sola. Nadie más. Elijo mi ritmo. Hoy elijo. Elijo ser feliz, por sobre todas las cosas. Elijo perseguir mis sueños, y soñar otros, porque los sueños no se acaban. Elijo hacer lo que amo, cada pequeña cosa, sin importar lo que me digan. Elijo ser feliz, si, elijo ser feliz, elijo soñar, elijo ser yo misma, elijo ser yo, elijo ser, elijo. Tic. Toc. Tic. Toc. No lo soportaba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario